Los ‘Spurs’ derrotaron por la mínima a Manchester United en Bilbao y se quedaron con el título
En el Estadio San Mamés de Bilbao, Tottenham Hotspur le ganó 1-0 a Manchester United la final inglesa de la Europa League y conquistó un trofeo continental, algo que no lograba desde hace 41 años. El único gol lo hizo Brennan Johnson a los 42 minutos del primer tiempo.
La jugada del gol la inició el uruguayo Rodrigo Bentancur, descargando atrás para el senegalés Pape Sarr, quien centró un balón hacia Johnson que él tan solo pifea, y con un intento de desvío del defensor Luke Shaw, terminó sorprendiendo al golero André Onana. Hasta ese momento se veía a dos equipos que no podían hacerse con el control y tenían más errores que aciertos, pero los londinenses mostraban mayor intensidad.
En la segunda mitad, los de Mánchester empezaron a asediar más el arco de Tottenham y tener el dominio territorial. Pero pese a estar encima, los ‘Spurs’ fueron más inteligentes en lo que restó del juego.
La más clara la tuvo Rasmus Hojlund para el United, aprovechando una mala salida del portero italiano Guglielmo Vicario y que finalmente el central neerlandés Van de Ven tuvo que salvar en la línea de puro milagro. Después, un cabezazo hacia afuera del portugués Bruno Fernandes y una atajada de Vicario a un cabezazo de Shaw le dieron emoción al juego hasta el final.
Con la victoria, no solo Tottenham festejó el título, sino además le quitó el invicto al United en el torneo y se clasificó automáticamente a la Champions League, pese a su discreta Premier. La imagen del coreano Heung-Min Son levantando el trofeo tras haber ingresado en el segundo tiempo se convirtió en la mejor postal.
